El gobierno del presidente Joe Biden va a aprobar una versión reducida del proyecto de perforación de petróleo y gas de ConocoPhillips en Alaska COP.N, valorado en siete mil millones de dólares, anunció ayer el Departamento de Interior de EU.
La decisión se conoce a pesar de una agresiva campaña de última hora de los opositores, que afirman que el desarrollo de las tres perforaciones en el noroeste de Alaska entra en conflicto con los muy publicitados esfuerzos de Biden por luchar contra el cambio climático.
La aprobación provocó el aplauso de las autoridades de Alaska y de la industria petrolera, pero las críticas de los defensores del medio ambiente.
Las autoridades de ese estado afirman que el proyecto creará cientos de puestos de trabajo y aportará miles de millones de dólares de ingresos a las arcas estatales y federales. El estado depende en gran medida de los ingresos procedentes de la producción de petróleo, pero la producción ha disminuido drásticamente desde su punto álgido en la década de 1980.
El destino del proyecto ha sido seguido de cerca, cuando Biden trata de equilibrar sus metas de descarbonización de la economía estadounidense y restaurar el liderazgo del país en materia de cambio climático, con la necesidad de subir el suministro nacional de combustible para mantener los precios bajos.
La ONU, que ha instado a los países a acelerar la transición para abandonar los combustibles fósiles, criticó la medida.
El Departamento de Interior aprobó el proyecto con tres plataformas de perforación, tras manifestar el mes pasado su preocupación por el impacto de Willow en los gases de efecto invernadero. Mientras que ConocoPhillips pretendía construir hasta cinco perforaciones, decenas de kilómetros de carreteras, siete puentes y oleoductos.