Los incendios españoles han marcado los mayores picos de energía liberada por las llamas, muy por encima de la media, y han batido su récord de carbono emitido a la atmósfera desde, al menos, 2003, según los datos de Copérnico.
Ambos indicadores atestiguan la fuerza que están desarrollando los incendios y se unen a las cifras de terreno quemado: 274.000 hectáreas según las imágenes satelitales a 17 de agosto. El peor año a estas alturas en casi tres décadas.
Este martes en la ciudad de Madrid el humo nublaba el sol. No provenía de un incendio en las inmediaciones sino de un fuego en Portugal. Casi al mismo tiempo, una cuadrilla de bomberos en Castellón tenía que huir a toda prisa de una lengua de llamas que, impulsada por el viento, los acorralaba velozmente en el incendio de Bejín.
274,313 hectáreas arrasadas por el fuego en 2022
Superficie forestal (en hectáreas) afectada por incendios forestales cada año en España, según los datos del Ministerio para la Transición Ecológica y los datos satelitales de la Unión Europea EFFIS
Esas mismas llamas, sin control este miércoles, han alcanzado la provincia de Valencia en su periplo destructor. Dos imágenes recientes que ilustran el verano español y europeo. Las observaciones por satélite de Copérnico han documentado la alta intensidad de los incendios en España, Portugal y Francia los últimos meses. Los siniestros españoles han liderado las mediciones.
En torno al 18 de julio pasado, las llamas liberaron al quemar la vegetación unos 16 gigavatios de potencia en una jornada, una cifra que multiplica por más de siete la media 2003-2021 para esos días. Cada gigavatio (Gw) son mil millones de vatios.
La intensidad de los incendios forestales en España
Este indicador, denominado potencia radiactiva del fuego (FRP), “es una medida de la intensidad de los incendios”, explica Copérnico. En Portugal, esa energía liberada llegó a un pico el 12 de agosto, con casi 6 gigavatios.
En julio había superado los cinco. Francia, por su parte, ha marcado máximos de potencia radiactiva del fuego de 5 y 4 Gw durante las mismas olas de calor.
La fuerza de los incendios en esta temporada ha provocado miles de evacuados al aproximarse a municipios y zonas pobladas. Los fuegos de Zaragoza y Castellón del último puente de agosto obligaron a desalojar a más de 2.500 personas. El de Losacio (Zamora) desplazó temporalmente a 5.000 personas.
También en la zamorana sierra de la Culebra, el fuego hizo que se evacuaran 34 poblaciones y se cortara la línea de AVE Madrid-Galicia.
Las cifras de terreno quemado este año son de récord. Si el valor absoluto en España ha multiplicado por más de tres la media de la década, en Portugal la superficie carbonizada es la mayor en comparación con el territorio total del país.