El expresidente de Perú, Alejandro Toledo, llegó ayer a Lima luego de ser extraditado desde Estados Unidos para cumplir 18 meses de prisión preventiva, mientras es investigado por recibir millones de dólares por la adjudicación de la construcción de una carretera a la empresa Odebrecht.
Toledo aterrizó en un vuelo comercial a las 7:02 (hora local), al aeropuerto capitalino.
La Policía peruana publicó una fotografía donde se ve al exmandatario custodiado por varios agentes junto a un fiscal. Vestía una chaqueta verde y tenía las manos cubiertas con una manta negra. Sus cabellos estaban desordenados y lucía demacrado. Una imagen opuesta a como vestía usualmente con elegancia, con los cabellos peinados.
Las autoridades judiciales indicaron que Toledo iba a ser llevado a un tribunal del centro histórico de Lima para un control de identidad de rutina junto a una revisión médica.
La agencia penitenciaria evaluará donde internará a Toledo, de 77 años, no obstante, el gobierno adelantó que es posible que sea recluido en la cárcel para presidentes en la zona este de Lima donde están presos otros dos exmandatarios: Alberto Fujimori (1990-2000) y Pedro Castillo (2021-2022).
El exmandatario había solicitado que se suspendiera su extradición, a la espera de que se resolviera una impugnación contra la decisión del Departamento de Estado de Estados Unidos de enviarlo a Perú,sin embargo, un tribunal de apelaciones denegó esta semana su última petición y un juez federal le ordenó que se entregara.