No hay nada como iniciar el día con una deliciosa taza de café que nos ayude a terminar de despertar por completo y que nos sirva como fuente de energía para rendir a lo largo de la jornada y aunque pareciera que una de las bebidas más consumidas a nivel mundial no suponen ningún riesgo, lo cierto es que puede llegar a ser perjudicial para la salud, en especial en pacientes con afecciones como hipertensión, también conocida como presión alta.
Y es que como te hemos contado en otras ocasiones, tomar café todos los días o peor aún, con más de una taza al día, puede representar grandes beneficios, pero también una larga lista de problemas a causa de sustancias como el ácido clorogénico o la cafeína. De hecho, esta última es la que puede llegar a causar complicaciones en personas que tienen la presión alta y es por ello que una de las recomendaciones de los expertos es reducir el consumo de esta bebida en este tipo de pacientes.
¿Es bueno tomar café si tengo hipertensión?
Como te contábamos, quienes tienen problemas para regular su presión arterial deben tener especial cuidado con el consumo de cafeína y no sólo en el café, sino también en otros alimentos, ya que también se puede encontrar en el té, bebida energéticas, refrescos y hasta en los chocolates.
“La cafeína causa un aumento corto pero drástico de la presión arterial, incluso si no tienes presión arterial alta. La causa de esta subida repentina en la presión arterial no está clara”, explica el sitio especializado en medicina, Mayo Clinic.
A pesar de ello, precisa que la respuesta del organismo ante la presencia de esta sustancia puede variar de una persona a otra, pero en general es común encontrar que quienes “toman bebidas con cafeína de manera regular tienen la presión arterial promedio más alta que aquellas que no toman estas bebidas”; sin embargo, con el paso del tiempo puede que el cuerpo no presente ningún problema con la hipertensión gracias a que el organismo se acostumbra a recibir esta sustancia frecuentemente.
Según los expertos, se ha visto que algunas personas puede desarrollar tolerancia a la cafeína y con ello no tener ningún efecto a largo plazo que afecte la salud por la presión alta, pero esto no es aplicable para todos los pacientes con hipertensión ni mucho menos quiere decir que se deba de abusar de bebidas como el café, sino consultarlo con un profesional de la salud que determine las condiciones bajo las que un paciente en especifico debe alimentarse.
Pues aunque la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) ha dejado en claro que la cantidad “segura” para la salud de las personas es consumir 400 miligramos de cafeína al día, algunos profesionales de la salud recomiendan reducirla a 200 miligramos, en especial si se habla de pacientes con problemas de presión arterial alta. De acuerdo con Mayo Clinic, esta última cantidad es la correspondiente a dos tazas de café, así que consúltalo con tu médico y no abuses de esta bebida.
Cabe destacar que hay formas de cuantificar desde casa cómo te afecta la cafeína en la presión y una alternativa es tomarte los niveles antes de tomar tu taza o tazas de café y al cabo de media hora o máximo dos horas tómala de nuevo y comprobar los resultados. “Si tu presión arterial aumenta de 5 a 10 puntos, es posible que seas sensible ante los efectos de la cafeína que elevan la presión arterial”, explica el sitio médico.
Asimismo, es importante que el consumo de café al día lo hagas en momentos estratégicos, pues aunque muchas personas lo toman para iniciar su día o para rendir de mejor forma durante el entrenamiento, se sabe que quienes tienen hipertensión deben evitar tomarla antes de realizar actividades que pueden aumentar la presión, como es el caso de ejercicios intensos o cargar pesas.
