A medida que los esfuerzos de búsqueda y rescate de sobrevivientes del terremoto del 6 de febrero comenzaron a disminuir en Turquía, los equipos de demolición empezaron a limpiar los montículos de escombros que dejó el peor desastre en la historia del país.
Las muertes confirmadas debido al terremoto subió a 45 mil, informó el jefe de la agencia de manejo de desastres del país, Yunus Sezer. Fueron 47 más que la cifra dada el sábado por la noche y un incremento mucho menor que las actualizaciones anteriores.
Sezer dijo que el trabajo de búsqueda y rescate en nueve de las 11 provincias afectadas había terminado. Las operaciones continúan en Kahramanmaras, el sitio del epicentro y Hatay.
“Continuamos estos esfuerzos todos los días con la esperanza de llegar a un hermano o hermana vivo”, agregó.
Aunque las operaciones de rescate siguen en las dos provincias, no ha habido señales de que alguien haya sido rescatado con vida desde que tres miembros de una familia fueron extraídos de un edificio derrumbado en Hatay el sábado. El niño murió más tarde.
La agencia de gestión de desastres de Turquía informó que unas seis mil 40 réplicas remecieron las 11 provincias que forman la zona de desastre declarada por el gobierno.
OFRECEN MÁS AYUDA
El secretario de Estado de EU, Antony Blinken, recorrió ayer en helicóptero una de las provincias más afectadas por el terremoto y prometió 100 millones de dólares más en ayuda para la región.
Blinken llegó a la base aérea de Incirlik (sureste), donde están acantonados unos mil 500 soldados estadounidenses desplegados en Turquía, país miembro de la OTAN.
La ayuda adicional incluye 50 millones de dólares en fondos de emergencia para refugiados y migración, y 50 millones de dólares en asistencia humanitaria, precisó.