Corea del Norte lanzó hoy un misil balístico no identificado al mar de Japón en lo que supone la enésima muestra de fuerza de régimen en un año en el que ha realizado un número récord de pruebas de este tipo, de acuerdo con información de la agencia de noticias EFE.
El Estado Mayor Conjunto surcoreano (JCS) dijo en un comunicado que Pionyang lanzó un misil balístico de tipo por el momento desconocido al mar del Este (nombre que recibe el mar de Japón en las dos Coreas), mientras que el Ministerio de Defensa japonés habló de proyectil aparentemente balístico y la Guardia Costera nipona mencionó que ya habría caído en el agua, aunque sin detallar dónde específicamente.
Comparta este artículo
La prueba de hoy llega en un momento en el que la tensión se encuentra en máximos en la península coreana y apenas un día después de que Seúl realizara una prueba para un futuro cohete espacial de combustible sólido con el cual quiere acelerar el despliegue de satélites de reconocimiento militar.
Cabe recordar que el último registro del lanzamiento de un misil fue el pasado 18 de noviembre, cuando el Estado Mayor conjunto surcoreano dijo que había “detectado un presunto misil balístico de largo alcance alrededor de las 10H15 (01H15 GMT) disparado desde la zona de Sunan en Pyongyang” hacia el mar de Japón
Aquel día, el misil recorrió una distancia de unos mil kilómetros a una altura máxima de 6 mil 100 kilómetros y velocidad de Mach 22, según el ejército surcoreano, que calificó el lanzamiento como “una amenaza a la paz y estabilidad en la península coreana”.
Por su parte, el primer ministro japonés, Fumio Kishida, de visita en Tailandia, señaló que el misil habría caído en aguas de la zona económica exclusiva (ZEE) de su país, cerca de la región norteña de Hokkaido.
Por su parte, Washington “condenó firmemente” el lanzamiento, que calificó como una “flagrante violación de múltiples resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU”, dijo en un comunicado Adrienne Watson, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional.
Récord de lanzamientos
Semanas atrás, Corea del Norte realizó una oleada de lanzamientos, incluyendo un ICBM que según Seúl habría fallado. También disparó un misil balístico de corto alcance que cruzó la frontera marítima de facto entre los dos países, cerca de aguas territoriales surcoreanas.
El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk-yeol, lo calificó como una “invasión territorial de hecho”. Ambos lanzamientos fueron parte del torrente de disparos del 2 de noviembre, con 23 misiles, más que en todo 2017. Expertos señalan que el Norte aprovecha la oportunidad de hacer pruebas de misiles prohibidos porque confía en evitar nuevas sanciones de la ONU dado el estancamiento en el organismo mundial por la guerra rusa en Ucrania.
China, principal aliado diplomático de Pyongyang, se unió en mayo a Rusia para vetar un intento estadounidense de endurecer las sanciones contra Corea del Norte en el Consejo de Seguridad de la ONU.
Washington respondió a las pruebas norcoreanas con una ampliación de sus ejercicios militares con Corea del Sur, incluyendo el envío de un estratégico avión bombardero.