El Departamento de Justicia de Estados Unidos dio a conocer en su sitio web que ayer, el ex alcalde Romeo Ramos Cruz, compareció por primera vez ante el Tribunal de Distrito de Estados Unidos por el Distrito de Columbia, tras su extradición el pasado 4 de agosto.
Ramos Cruz de 57 años, fue alcalde de Santa Lucía Cotzumalguapa, municipio del departamento de Escuintla, para el período 2020-202, y es requerido por ese país por cargos de narcotráfico, específicamente “conspiración para importar cocaína en territorio estadounidense”.

Investigación señala que transportaba cocaína
Según documentos judiciales, entre 2022 y 2024, Ramos Cruz habría sido un miembro clave de una organización del narcotráfico con sede en Guatemala, responsable de transportar cocaína hacia mercados de ese país .
También se le señala de que durante ese tiempo, en el que también ejerció como alcalde, utilizó su cargo público para facilitar el transporte de drogas, especialmente para coordinar la logística de los cargamentos, y en al menos una ocasión, ayudó a ocultar cocaína procedente de Venezuela como un envío de cemento.

Incluso, emitió una carta oficial del municipio para ayudar a que el envío evadiera los controles de las autoridades guatemaltecas.
De ser declarado culpable, Ramos Cruz podría enfrentar una condena de cadena perpetua. Se está a la espera de las siguientes audiencias.
Este caso es parte de la operación Take Back America (Recuperar a América).

De acuerdo con la acusación, entre 2022 y 2024 Ramos Cruz habría integrado una red de narcotráfico que operaba en Guatemala y trasladaba cargamentos de droga hacia Estados Unidos.
Durante ese periodo ejercía como alcalde de Santa Lucía Cotzumalguapa, Escuintla, y se le señala de haber utilizado su posición para facilitar la logística de los envíos ilícitos.

Las autoridades estadounidenses indican que, en una ocasión, el exfuncionario habría colaborado para encubrir un cargamento de cocaína procedente de Venezuela como si fuera un envío de cemento, incluso emitiendo una carta oficial del municipio para evitar inspecciones locales.

Si el tribunal lo declara culpable, Ramos Cruz podría enfrentar una sentencia máxima de cadena perpetua.
La investigación estuvo a cargo del FBI, con apoyo de la DEA, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) y autoridades guatemaltecas.

La extradición se logró por medio de la coordinación entre la Oficina de Asuntos Internacionales del Departamento de Justicia, INTERPOL y la Policía Nacional Civil (PNC) de Guatemala.
El caso forma parte de la operación “Recuperemos América”, iniciativa del Departamento de Justicia de EE. UU. para combatir organizaciones criminales transnacionales y el tráfico de drogas.
*Con información de la Oficina de Asuntos Públicos del Departamento de Justicia de EE. UU

