Los magistrados que integran de manera suplente la Cámara Penal, resolvieron trasladar el caso de Melissa Palacios hacia un juzgado de Mayor Riesgo en la Ciudad de Guatemala.
La decisión la tomaron, luego de escuchar la petición de la Fiscalía contra el delito de Femicidio, en la cual, expusieron que los indicios recabados en la investigación, apuntan a un asesinato, pues hubo premeditación.
Ese delito fue imputado en la audiencia de primera declaración en contra de los acusados: María Fernanda Bonilla y Luis Marroquín en 2021, pero semanas después, el juez de Zacapa, José Maximino Morales González, que en ese momento conocía el caso, modificó el delito a homicidio en estado de emoción violenta y encubrimiento propio, pues indicó que algunos indicios eran circunstanciales.

También tomaron en consideración, lo manifestado por el Instituto de la Víctima, como querellantes en el caso y en acompañamiento a la familia de Melissa Palacios, pues señalaron que el caso ha representado un riesgo para la familia de la víctima, debido a que han sufrido amenazas, intimidaciones y hasta un atentado.
Además, porque en cada audiencia desarrollada, hombres fuertemente armados llegan a los alrededores de los juzgados.
Estos y otros argumentos, fueron tomados en consideración para que la Cámara Penal determinara que el caso requiere de un tratamiento de alto riesgo.
Para tomar la decisión, los magistrados deliberaron por tres horas.

“Gracias a Dios”
Anabella Chacón, mamá de Melissa, por cuatro años ha buscado justicia y se conmovió al escuchar la resolución de la Cámara Penal.
“Si se pudo”, “Gracias a Dios”, fueron las frases que usó para expresar su alegría porque el caso sea conocido en la capital, en donde espera que los acusados del crimen de su hija, enfrenten la justicia por los delitos cometidos.
El nuevo juzgado
Parte de la resolución de la Cámara Penal fue asignar al juzgado de Mayor Riesgo “C” para que a partir de ahora conozca el caso de Melissa Palacios.
De acuerdo con el abogado del Instituto de la Víctima, Juan Carlos Aquil, el juzgado de Chiquimula tiene tres días para trasladar el expediente a esta nueva judicatura.
El Juzgado de Mayor Riesgo “C”, estaba a cargo de Silvia de León, para la juzgadora fue trasladada hace unas semanas.
Según el abogado, cuando el caso esté en la capital, la defensa pedirá que se desarrolle la audiencia de etapa intermedia para pedir la aceptación de cargos, pero ellos pedirán que se suspenda y que previo a esa etapa se conozca una audiencia para modificar el delito en contra de los acusados.
Apelarán
La abogada de María Fernanda Bonilla, Victoria Gobern, aseguró que la decisión no está en firme y que apelarán la resolución.
“No se está respetando el debido proceso”, aseguró.
La jornada se vivió con expectativa, pues se esperaba que a la audiencia acudiera María Fernanda Bonilla y Luis Marroquín, pero el Sistema Penitenciario solo informó que el traslado se suspendió.
Mientras, en los alrededores de la Torre de Tribunales, elementos de las Fuerzas Especiales de la Policía Nacional Civil, resguardaban el edificio.
El caso
Melissa Palacios desapareció el 4 de julio de 2021 en Zacapa. Un día después fue encontrado su cuerpo con señales de violencia.
A los días, capturaron a María Fernanda Bonilla y Luis Marroquín, pues fueron los últimos que la vieron con vida.
La Fiscalía investigó el caso y entre los indicios que presentó ante un juez de Zacapa estaban audios y chats en los que se demostraba que la acusada planificó el asesinato. Por eso es que el MP imputó el delito de asesinato.
Según los chats, se habrían puesto de acuerdo para matarla.
“Pero yo sí la voy a matar a puros pijazos”, escribió María Fernanda.
Marroquín le respondió “tráela para aka i la echamos (sic)”.

El Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) certificó que Melissa Palacios murió a causa de los golpes que recibió en la cabeza.
En 2021, cuando se presentó esto en una audiencia, el juez de Primera Instancia Penal de Zacapa, José Maximino Morales González, dijo que no era evidencia suficiente, ya que eran capturas de pantalla de conversaciones que no estaban completas y que se podían sacar de contexto.
Y bajo esa premisa es que modificó el delito a homicidio en estado de emoción violenta.