Con un semblante serio se vio a los diputados Olga Villalta, Samuel Pérez y Román Castellanos al finalizar la reunión en la que se discutió el reciente anuncio de la creación de un nuevo partido político.
Cerca de tres horas estuvieron reunidos los legisladores con dirigentes departamentales del Movimiento Semilla, quienes pidieron explicaciones sobre el tema, ya que no se les habría consultado antes de iniciar los procedimientos.
Según lo previsto, al culminar la junta se fijaría una postura sobre las intenciones de Samuel Pérez y otros congresistas al dar vida a una otra organización, con miras a competir en las elecciones generales de 2027; sin embargo, no se lograron acuerdos.
Villalta, quien habría moderado el diálogo, indicó que se pidió un compás de espera al grupo de Pérez, pero eso no sería posible, debido a que ya se convocó a una asamblea.
Siguen en la marcha
Castellanos confirmó que se plantearon varias dudasdurante la reunión, pero también hizo ver que el tiempo los apremia y por ello continuarán con la asamblea del grupo promotor que se convocó para este domingo 25 de mayo, en el Parque de la Industria. Así se iniciará el proceso para crear al nuevo partido.
Pese a que habría molestias al respecto, el diputado remarcó que la agrupación que se busca conformar sería una extensión de Semilla, ya que “refundará”, tomando como base los principios originales de la organización que ahora está cancelada.
Durante la breve conferencia de prensa, también se dio a conocer que, por ahora, el grupo de Samuel Pérezno habría logrado convencer a otros militantes de Semilla de unirse al nuevo proyecto.
Les pidieron explicaciones
Tanto Pérez como Castellanos fueron convocados a una reunión con la dirigencia del Movimiento Semilla, para explicar su decisión de crear un nuevo partido.
Las tensiones a lo interno del grupo se han arreciado. Así se evidenció con las declaraciones que dieron ambos legisladores a su llegada a la sesión, la cual habría sido convocada por su compañero Duvalier Castañón.
Aunque coincidieron en que es sano poder socializar su nuevo proyecto político, Castellanos también señaló a la dirigencia de Semilla de tener abandonadas a sus bases en los departamentos. Agregó que con la organización que se busca crear se les tomaría más en cuenta.
En la misma línea se pronunció Pérez y reiteró, igual que en ocasiones anteriores, que no hay fricciones y que se busca socializar su propuesta. Él y Castellanos defendieron su nuevo proyecto e insistieron en que se trata de una refundación de Semilla.
A puerta cerrada
Uno de los momentos tensos en el marco de la reunión se dio cuando los citados legisladores llegaron a la sede del Movimiento Semilla.
Los dirigentes del grupo ya habían indicado que la junta sería a puerta cerrada, pero los congresistas dejaron pasar a varios periodistas que se encontraban en el sitio. Esto propició que a algunos le cerraran la puerta del salón donde se celebraría el diálogo.
Minutos después de ese suceso, Olga Villalta salió a aclarar que no se daría acceso a los medio de comunicación y que las declaraciones sobre lo acordado se brindarían al finalizar el encuentro.
Fieles a Bernardo Arévalo
Hasta ahora, se conoce que hay ocho diputados que mantienen fieles al presidente Bernardo Arévalo y a otros funcionarios que forman parte de la dirigencia de Semilla, como Abelardo Pinto y Jonathan Menkos.
La también parlamentaria Alma Luz Guerrero expresó que esa facción conserva la postura de quedarse con el “Semilla institucional”, aunque reconoció que serán las bases quienes decidan qué harán respecto del nuevo partido que construye Samuel Pérez.
Los legisladores que tendrían esta postura son:
- José Carlos Sanabria
- Victoria Godoy Palala
- Raúl Barrera
- Brenda Mejía
- Duvalier Castañón
- Alma Luz Guerrero
- Luis Enrique Ventura
- Ivana Luján
Un aspecto destacado es que aunque Abelardo Pinto forma parte de los dirigentes del Movimiento Semilla, no asistió a la sesión. Esto se debe a que tiene impedimento legal, por ser funcionario de Gobierno.
Además, se confirmó que el presidente Arévalo habría instruido que ningún ministro puede intervenir en asuntos partidarios.
